Apenas se supo que la actriz venía manteniendo una correspondencia via email con el candidato demócrata a la presidencia, la noticia se hizo pública y las alarmas saltaron en toda la prensa de Washington.
"Me parece algo terriblemente sexista", dijo la actriz en una entrevista. "Si esos emails hubieran sido entre Obama y George Clooney nadie haría tanto escándalo". Digamos que el ejemplo no fue el mejor, pero es cierto que por una serie de emails no se puede suponer nada fuera de lo común.
Muy rápidamente, Obama tuvo que salir a aclarar que la actriz de "Match Point" no tiene su email personal y que la "relación" se limitó a un email que ella mandó a su correo público, que su asistente se lo copió y que él contestó educadamente.
"Quise expresarle mi apoyo a su compromiso y a su campaña", explicó la actriz, de 23 años, actualmente en pareja con el actor Ryan Reynolds y a punto de estrenar en los Estados Unidos la última película que hizo para Woody Allen, "Vicky Cristina Barcelona".
Obviamente que todo parece muy inocente y simple, pero tomando en cuenta la voracidad de los republicanos para con estos temas (recuerden como se le fueron encima a Bill Clinton o el mítico y misterioso supuesto affaire entre John F. Kennedy y Marilyn) no extrañaría que escuchemos más sobre este tema en los próximos meses pre-electorales
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