2.12.08

Premios Clarín Cine: noche con sorpresas


Ocho aciertos sobre trece es un bajo promedio para mis predicciones de los Premios Clarín. Lo admito: suelo ser más certero con mis cálculos. Soy de esas personas que ganan el 90% de las veces que apuestan por los Oscar, por ejemplo. Pero así como los premios de la Academia de Hollywood pueden predecirse leyendo meses y meses de análisis y notas en todos los medios, los de Clarín son una lotería. Por un lado, claro, no son los Oscar, y la prensa no va a vivir de ellos por meses. Y por otro, al ser organizados por un medio, el mismo medio no puede hablar en la previa de quién podría y/o debería ser candidato, y los otros medios, previsiblemente, los ignoran.

Así que siempre hay sorpresas. En una ceremonia larga en la que se extrañó la presencia de Roberto Pettinato en la conducción --es la clase de conductor que siempre puede salir por el camino menos pensado, frente a los medidos y serios Andy Kusnetzoff y María Laura Santillán--, la mayor y mejor sorpresa fue el premio a Diego Capusotto como figura del año.

Pero vamos a lo nuestro, digo, al cine. "Aniceto" fue la gran vencedora. Sin duda, resulta muy difícil criticar la decisión ya que Favio es, merecidamente, un intocable del cine nacional y "Aniceto" es una muy buena película. Pero en mi opinión --y más allá de todo lo que he defendido a Favio en este blog tras el dificultoso estreno de "Aniceto"--, no se trata de su mejor película y el premio fue algo así como "patear la pelota para afuera". Uno premia a Favio y los perdedores miran para otro lado con cara de "¿Y, que querés, es Favio? Todo bien con el maestro", y nadie rezonga ni critica la decisión. Yo no rezongo, pero estoy convencido de que "Leonera" era mejor película. Y por eso pensé que la iban a votar, dejando a Favio el premio a mejor director, que sí podría funcionar como un reconocimiento a la carrera. O hasta el de figura del año. Yo confieso haber votado por "Leonera" en ambos rubros y por Favio como Figura del año. Me parecía que tenía sentido. Favio es más grande que "Aniceto".

La película de Favio se quedó con el premio a la música y Hernán Piquín ganó como revelación masculina, ambos premios previsibles. "Café de los maestros" fue mejor documental. "Cordero de Dios" se llevó varios: el de opera prima y el de Malena Solda, que le ganó a las dos actrices de "Leonera" (García y Medeiros) que, o bien se eliminaron entre sí, o perdieron por ser menos conocidas que Solda. Lo mismo sucedió con el premio a Capusotto por "Regresados": está diez minutos en una película que seguramente vieron pocos de los votantes. Me da la impresión de que ganó ahí por portación de apellido y es el único de los, no se, cinco premios que se llevó que no creo que merezca, si bien no está mal en la película.

Lo que sucede con el crecimiento en número de jurados es contradictorio: sí, es más democrático y plural pero, a la vez, ¿cuántos de los jurados ven, realmente, la mayoría de las películas y cuántos votan por "portación de cara"? Hay claros ejemplos de que muchos votana nombres que conocen sin ver las películas en las que ellos participan. Y me animaría a apostar de que no muchos vieron "Aniceto" sino que votaron directamente por "la peli de Favio".

Oscar Martínez ganó merecidamente el premio al mejor actor por la película de Daniel Burman, "El nido vacío" y estoy dejando para el final los premios a "Leonera" que se vino --un clásico Traperiano-- con una banda de más de diez, quince personas a la ceremonia, varios de ellos (me enteré anoche) lectores de este blog. La película de Pablo compartió con "Lluvia" y con "Cordero de Dios" el gran trabajo de fotografía de Guillermo "Bill" Nieto (subió a recibirlo Lucía Cedrón, pero me da la impresión de que "las manos" de Bill se notan más en las otras dos películas) y se quedó con el premio al Guión escrito a ocho manos por Pablo, Martín Mauregui, Alejandro Fadel y Santiago Mitre. Alguno de ellos me decía en medio de la transmisión que ganar el premio al mejor guión era un "mal presagio", mientras que el Team Burman decía que perderlo era "un buen presagio". El pesimismo traperiano le ganó a un raro ataque de optimismo de la gente de BD Cine. El triunfo de Favio terminó dándole la razón a los que creen que ganar guión es un premio consuelo.

Por último, los merecidos dos premios a Martina Gusman. El de Revelación no lo podía perder, pero temí que perdiera el de mejor actriz por, de vuelta, "portación de apellido" de sus rivales, Morán y Bertuccelli. Pero se ve que, en este caso, los votantes de hecho vieron "Leonera" y se dieron cuenta de que no había otra opción que premiarla. No será Cannes (donde perdió, insólitamente, a manos de la actriz brasileña del filme de Walter Salles en una película de un protagonismo coral), pero al menos se hizo justicia. Que Martina vaya guardando lugar para sus premios en la oficina de Pablo: la quisiste en tu película, la pusiste ahí, ahora bancate que gane más premios que vos...

7 comentarios:

Anónimo dijo...

¡La película del año es Historias Extraordinarias!
¡¡¡Vamos a destruir al INCAA y Clarín con una canción!!!

Peacock dijo...

Claro, porque "Clarín" estuvo en contra de "Historias extraordinarias", ¿no? No le dio cobertura, no tuvo una crítica de Cinco Estrellitas, no se le dio bola. Tenés razón...

Lo que habría que haber hecho era que la manga de votantes vean la película, pero la metieron en la producción 2008 y cerraron la votación, no se, dos semanas después. Y nadie la había visto. Tendría que haber quedado para el 2009.

Anónimo dijo...

Salvo el de Capussotto, excepción que confirma la regla, todos los premios son de un conservadurismo rancio, acorde con los Condor y demás esperpentos. Ningún premio local se salva...

Anónimo dijo...

los que votan distinto a vos, no vieron las peliculas.
los que votan como vos, si.
interesante...

Peacock dijo...

No sé de donde sacas que yo dije eso. Para nada. Me parecen votables las tres películas nominadas y la mayor parte de los actores nominados, pero doy fe por haber sido testigo de errores en la votación que hay gente que vota sin ver las películas. Un dato: mucha gente votó a una actriz por un papel en una película en la que no trabajaba. El año pasado estuvo nominado como mejor actor en LA SEÑAL un tipo que aparecía de espaldas dos segundos en una escena y que se lo incluyó en el "ayudamemoria" a los votantes como parte del elenco. Sé que mucha gente vota sin ver. Los demás, me parece perfecto que voten lo que quieran. Lo de Capusotto, en este caso, no tiene otra explicación: no porque no lo merezca (por mí que le den todos los premios del mundo, es uno de los mejores cómicos de la historia argentina), pero actúa cinco minutos en una película que estuvo dos semanas en cartel.

Anónimo dijo...

Al mejor estilo Lerer: Los que votaron por Aniceto, ni vieron la película ( ganó por portación de cara) Los que votaron a su amiga Guzmán, si vieron la película.!!!.
También dice que acierta el 90% de los Oscars, y por otro lado se queja del aumento de votantes en el premio del multimedio para el que trabaja. ¿Sabe el Sr. Lerer cuantos son los miembros de la Academia? La de allá, of course.

Peacock dijo...

Vamos de vuelta. ¿Vos leíste lo que yo escribí de "Aniceto"? ¿Vos creés que la película a mi no me gusta?" Creo que "Leonera" es mejor película. Punto. Es mi opinión. Y tengo la impresión de que algunos votaron a Favio porque es Favio. Y esto no es una crítica a la película, a lo sumo al comportamiento de algunos votantes.
Y que gane Gusman no tiene nada que ver con amistad (de hecho, no es amiga mía), sino con lo que creo yo es el mejor trabajo actoral del año. Creo que Oscar Martínez lo merece también y jamás crucé una palabra con él.

La Academia son casi 6.000. Pero las distribuidoras se ocupan de arman screenings y mandar DVDs a cada uno de los votantes. Y eso, que yo sepa, acá no sucede. No es culpa necesariamente de los votantes no ver las películas. También los productores podrían hacer algo para que las vean... ¿Cómo hacen si no?